Enseñanzas Náuticas

Para conocer la mar y todo lo que le rodea

Un terrible temporal siembra la costa de naufragios

Posted by jonkepa en febrero 6, 2011

Docenas de marinos desaparecieron, hace un siglo, en las playas de Castellón y Valencia.

El «Abanto». La fotografía de Barberá Masip para "Blanco y Negro", muestra al "Abanto", semihundido, con el cadáver de un marino a la izquierda de la imagen, abajo. En el recuadro superior, el tripulante que se salvó.

Hace un siglo, durante la primera semana de febrero de 2011, la costa mediterránea española se llenó de luto: un duro temporal de Levante hizo zozobrar a numerosos barcos de vela y vapor, de pesca y pequeño porte, pero también vapores comerciales que terminaron embarrancados en la playa después de quedar al garete. Durante más de una semana, desde Barcelona a Denia, todo fue desastre y desolación para los puertos.

Acostumbrados a vivir rodeados de una información meteorológica concreta, abundante y cada vez más segura, los ciudadanos del siglo XXI, por suerte para todos, casi desconocen lo que son las noticias que dan cuenta de catástrofes marítimas. La existencia de satélites meteorológicos, el radar y las buenas comunicaciones por radio, han conseguido reducir drásticamente lo que, hace ahora cien años, era un rosario de malas noticias para las familias con hombres en la mar.
El temporal que barrió la costa arrancó el 30 de enero de 1911 en su primera fase y, hacia el 2 de febrero se reactivó de forma más virulenta, redoblando los daños ya causados. Así, durante una semana, todo fueron desgracias.
Nunca se hizo un balance detallado de las víctimas causadas, tanto en vapores de mercancías como en barquillas de remos desaparecidas. Pero probablemente fueron más de cincuenta. En Barcelona, Tarragona y Castellón, las flotas pesqueras fueron sorprendidas faenando; y apenas unas pocas barcas tuvieron la suerte de ganar un puerto seguro en la costa. El número de víctimas multiplicó los dramas familiares. En las playas catalanas, el mar lanzó a la arena los restos desarbolados de muchas embarcaciones, para después ir goteando los hallazgos de cadáveres.
La tragedia mayor, sin embargo, se dio ante el puerto de Canet, donde al menos tres vapores aguardaban carga naranjera o proyectaban cumplir uno de los regulares envíos de mineral de hierro turolense hacia la siderurgia vasca. Los buques, al verse sorprendidos por el ventarrón, levaron anclas y se hicieron a la mar, para capear el oleaje. Pero todo fue inútil: el ‘Caucasian’ fue fotografiado más tarde en la playa de Moncofa, encallado, cuando el mar se fue sosegando; el ‘Somorrostro’, por su parte, entregó sus últimas fuerzas en las arenas de Canet.
Con todo, el ‘Abanto’, un vapor de 3.500 toneladas, de la compañía Sota-Aznar y matrícula de Bilbao, se llevó la peor parte. Natalio Larracoechea, el comandante, de apellido vasco pero nacionalidad cubana, ordenó levar anclas y zarpar a toda máquina. Pero no se salvó: al día siguiente, con las olas rompiendo sobre cubierta, fue visto desde tierra. La gran chimenea, casi arrancada por un duro golpe de mar, mostraba a las claras lo ocurrido: el agua había entrado hasta la sala de calderas y apagado los hornos. Y todo el mundo sabe que un buque sin motor está vencido.
El ‘Abanto’ perdió a su comandante y a 21 tripulantes, barridos de cubierta por la furia de las olas. Solo uno se salvó, José Más Pomares, un muchacho que había bajado a tierra antes de que se desatara la furia del mar. LAS PROVINCIAS, durante varios días, dio generosas crónicas de la tragedia, informó de los hallazgos de cadáveres que el oleaje lanzaba a las playas, y se conmovió con el dolor de las familias, en los puertos del norte de Valencia y de toda la Plana de Castellón.
En esas crónicas se puede ver, por añadidura, cómo además de la protección de la técnica meteorológica y naval, el progreso y el desarrollo han traído lo que entonces faltaba: protección social a las familias de las víctimas. Porque en 1911, a las viudas y huérfanos de los marinos no les quedaba más recurso que la caridad de las pobres colectas que hacían las parroquias y las cofradías de pescadores.
F. P. Puche en Las Provincias

Programa especial Taula rodona “El temporal de 1911, cent anys després

votar

5 respuestas to “Un terrible temporal siembra la costa de naufragios”

  1. Información Bitacoras.com…

    Valora en Bitacoras.com: Docenas de marinos desaparecieron, hace un siglo, en las playas de Castellón y Valencia. El «Abanto». La fotografía de Barberá Masip para «Blanco y Negro», muestra al «Abanto», semihundido, con el cadáver de un marino a la …

    Me gusta

  2. Bon dia

    Aquest terrible temporal està essent recordat per diverses de les poblacions afectades. A Cambrils, el Museu d’Història i l’Arxiu Municipal han produït una exposició que pretén explicar les seves causes i conseqüències i fer el balanç global de víctimes.

    Més informació a http://www.cambrils.cat/continguts/detall/2122000/1847/1911-sobreviure-a-la-tempesta.

    L’exposició es podrà veure a la Torre del Port de Cambrils fins al 24 d’abril i després serà itinerant per Badalona, Caldes d’Estrac, Barcelona i altres poblacions.

    Montserrat Flores Juanpere
    Arxivera municipal de Cambrils

    Me gusta

  3. […] by jonkepa en julio 3, 2011 Fue hace un siglo. El mar se tragó barcos, arrasó puertos y se cobró 56 muertos en nuestra costa. Sagunt y Peñíscola se vistieron de luto tras una tempestad no esperada que tiñó de cadáveres […]

    Me gusta

  4. […] recuerda a sus 27 pescadores muertos en aquel fatídico invierno de hace ahora cien años. Bautista Roig, Joaquín "El Gallo" […]

    Me gusta

Deja un comentario