Las aguas del Índico andan revueltas en los últimos años. Pero a mar revuelto, no hay ganancia de pescadores, sino de piratas, que se confunden con los legítimos trabajadores del océano. De momento, la intervención de fuerzas armadas en la región parece haber reducido la gravedad de la violencia que asediaba aquellas aguas, pero Naciones Unidas desconfía. Acaba de aprobar un nuevo fondo de dos millones de dólares para desarrollar un programa piloto que, por medio de la tecnología biométrica, sirva para separar el polvo de la paja, o pescadillas de tiburones, en el Índico.
Comenzará en Somalia, en la región de Puntlandia —justo en la punta del llamado Cuerno de África—, y pretende crear un registro biométrico de todos los pescadores que faenen en la zona.
Esta tecnología permite crear bases de datos personales accesibles para distintos organismos y autoridades allí donde estén o las necesiten, para identificar sin lugar a dudas a cualquier persona. Los piratas de la región aprovechan a menudo la confusión y se hacen pasar por pescadores, incluso cuando autoridades o militares acceden a sus barcos. Lee el resto de esta entrada »